Reflexiones al calor del congreso Equiciudad 2011
Estamos asistiendo via streaming al congreso #EQUIciuDAD2011, celebrado en Donosti los días 14 y 15 de Diciembre. Hoy Daniel Ayala Serrano, para los twitteros @ayserrano, nos ha hablado de la labor de las tecnologías en las ciudades, y como las redes sociales pueden afianzar procesos tendentes a una mayor justicia ciudadana, nos ha mostrado ejemplos como el de cámara abierta en San Martín de Porres (Córdoba), coinstreet, shareinidea.org…en fin, una serie de prácticas ciudadanas alimentadas por las redes que han afianzado en algunos de los casos, procesos participativos para la transformación urbana.
Este tipo de mecanismos o procesos semiinformales virtuales, generan nuevas formas de hacer para los ciudadanos, pues una cosa es indiscutible o está bastante clara, y es cómo los nuevos medios de comunicación como nuevas herramientas de información, difusión y en algunos casos participación, son prácticas de sólo una década, en lo que a la ciudad se refiere. Es algo novedoso.
Las dudas o cuestiones nos vienen, cuando más allá de consideraciones esenciales como, quién tiene el poder de difundir por la red procesos de transformación urbana, quien tiene los conocimientos para poder llevarlo a cabo o quién tiene la capacidad para producir conocimiento a través de la red…nos surge la duda de la responsabilidad civil que le queda a la administración ante esta situación de «do it yourself», que están demostrando determinadas prácticas ciudadanas virtuales.
Si las nuevas redes suponen nuevas prácticas en el territorio, más independientes, más autónomas por su perfil de gratuidad, si la ciudadanía está compartiendo por la red sus problemáticas en la ciudad, si los profesionales se sirven de la red para difundir y compartir sus conocimientos técnicos ante dichas problemáticas, y ambos llegan a cooperar en algún momento a través de la red, ¿cuál es el papel de una administración local que se rige por otros mecanismos, digamos administrativos y burocráticos? Si reconocemos que la administración es en último término quién tiene la responsabilidad civil de que mejore su ciudad,y no sabe o no reconoce estas nuevas formas de trabajo y participación on-line,¿puede paralizar, obstaculizar procesos pop-up surgidos al calor de la red?
Al suponer que las tecnologías aportan nuevas formas de hacer que abogan por procesos cooperativos informales que se mueven a una velocidad abrumadora, el papel de la administración local puede ser de dos tipos:
_apuntarse al carro y subvencionar algún que otro espacio virtual de participación que ya se está llevando a cabo por los ciudadanos,-si no les supone ningún esfuerzo político-.
_replicar espacios virtuales que se estén dando en otros lados,-si no les supone ningún esfuerzo político-.
Sabemos que los limites de la administración, de los ayuntamientos están bien claros, trazados, y que su papel cada vez es más exiguo, no son los actores principales, eso está claro. Lo que más bien nos preocupa es su cada vez menor responsabilidad en las políticas públicas, al cada vez mayor protagonismo del ciudadano en la red, debido a esas nuevas formas de hacer a pequeña escala que marcan transformaciones urbanas que mejoran nuestras ciudades, y que sobretodo ahora están más reconocidos gracias a la difusión virtual. Pero cuando se trata de planeamientos urbanos, de viviendas…¿hasta dónde llega este poder ciudadano en la red? ¿de nuevo bajamos a la realidad y nos chocamos con la incapacidad de los ayuntamientos para motivar procesos participativos? preguntas y más preguntas…
Gracias a Equiciudad 2011!