Al-Azraq_recta final
Este martes hemos realizado la última Comisión de Seguimiento del proceso participativo de la Plaça Al-Azraq; en ella se llegó a un acuerdo para que la propuesta surgida de este proceso forme parte del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Alcoi, esto podría ser un buen inicio para un proceso que llega a su fin. En pocas semanas se realizará una presentación pública del proceso y la propuesta y podréis verlo en nuestro apartado de TRABAJOS.
Como adelanto, queremos compartir parte de las conclusiones que sacamos después de un trabajo así en que se unen participación y espacio público. Desde el principio hemos pretendido que el proceso fuese una reflexión crítica sobre el espacio que llegase a convertirse en una formalización física, en una modificación consciente del espacio por parte de los participantes basada en la acumulación del conocimiento que producía cada fase del proceso. Pretendíamos que el proceso diese autonomía a los participantes, que les permitiera influir en la estructura espacial, al tiempo que el mismo proceso influía en la estructura social de la ciudad al capacitar a los participantes, generar redes con otras asociaciones y técnicos entorno a un proyecto común.
Basamos toda la actuación en una forma de entender el urbanismo que vas más allá de de un instrumento técnico de producción de suelo y prolongación de vías de comunicación; una forma de entender la planificación como herramienta de solución de desequilibrios y no de generarlos; en definitiva un urbanismo y una planificación con un fuerte componente social, que se basan en necesidades concretas, expresadas y estudiadas con detalle, con un fin pedagógico que entienda lo urbano como algo complejo y no obvio, que genere espacios «usables», que comparta la programación y la gestión…
Un proyecto como el nuestro hace que se tenga que entender el espacio público, no como un producto inmobiliario, como algo residual entre proyectos residenciales, resultante de computos, estándares…, más bien al contrario, nuestro proyecto hace que el espacio público se entienda como un elemento articulador de la trama urbana, una forma de mejora de la renta real de los ciudadanos (como la entiende D. Harvey), de mejora de las posibilidades de uso cotidiano de un barrio, de creación de nuevas centralidades urbanas, es decir, una planificación de espacio público que solvente desequilibrios, un urbanismo como medio de transformación social.
Hemos disfrutado con el proceso, hemos aprendido, hemos visto como nuestro nivel de estrés se ponía por las nubes, pero… para nosotros ha valido la pena, esperamos que para quienes participaron del proceso el resultado sea el mismo.